MÄGO DE OZ: LOVE AND OZ

Warner

7/10

Ya les vale a estos Mägo de Oz. Andan aún sus incondicionales sensibles con la lágrima asomando por el ojo, encajando todavía la marcha de José Andrëa tras sus últimos conciertos con sus ya ex compañeros, y la noticia del paréntesis que se toma la banda hasta 2013… en fin, que no se les ocurre otra cosa que lanzar un recopilatorio de baladas. Bromas aparte, lo cierto es que, cuando llega uno de esos momentos de hacer balance, se agradece el hecho de no recibir otro grandes éxitos sin más. Y es que en esta ocasión han querido darle una vuelta de tuerca al asunto: “Love and Oz”.

Doble CD en el que repasan algunas de sus mejores y más conocidas baladas -por cierto, como ya hicieran meses atrás los Aerosmith-, que no son pocas, 25 exactamente, con permiso de dos temas inéditos y alguna que otra rareza que señalo más adelante. Apuntar antes, así en líneas generales, cómo destaca el peso de la trilogía de “Gaia”, mientras cuesta algo más encontrar pistas de trabajos anteriores como “Finisterra” y “La Leyenda de la Mancha”. Por ello, y puestos a poner etiquetas, podría decirse que con “Love and Oz” le dedican un guiño más especial si cabe a sus seguidores más jóvenes.

En cualquier caso un detalle que acaba siendo lo de menos en cuanto pulsamos el “play”. Me refiero a que, curiosamente, el listado lo abren las dos canciones inéditas: “Te guardo un beso (por si lo quieres)” y “El hombre de la mirada triste”. En la línea de todo lo que sale del puño de Txus di Fellatio y con un acompañamiento instrumental que no puede ser más íntimo, de modo que, repito, alguna lagrimita se escapara por ahí.

“Desde mi cielo”, “Adiós Dulcinea” y su continuación “Siempre”, “Pensando en ti” y “El peso del alma”, las versiones de “Dust in the Wind” de Kansas y de “Glory to the Brave” de HammerFall respectivamente... se suceden las canciones envueltas en esa atmósfera intimista.  Cuando nos queremos dar cuenta habrá expirado el primer CD justo con otra versión, “Es hora de marchar”, la del original “Rainbow Eyes” de los Rainbow de Dio y Blackmore.

Como no podía ser de otra manera, más de lo mismo en el segundo disco. Desde el “Epílogo” de “Gaia: Epílogo” con el que arranca –curioso-, hasta su célebre revisión de “Somewhere over the Rainbow” o ese himno de título “La rosa de los vientos” en su versión más lenta como es lógico. Entre medias, la siempre llamativa “Noches de bohemia” en boca de José,  y rarezas como “Memoria da noite”, la que fuera cara B del single “Hoy toca ser feliz”, una “Siempre” cantada esta vez por una auténtica coral infantil y  “Mi viaje”, uno de los temas del proyecto paralelo de Carlitos y Peri llamado Casa de Fieras –sin olvidarnos de la contribución de los KHY de Patricia Tapia, cuya canción “Cuando se apague la luz” encontramos en el primer CD-. Lo dicho, un detalle de cara a sus incondicionales, quienes sabrán apreciar el trabajo como merece, y un bonito punto y aparte.  "Te guardo un beso (por si lo quieres)" y "El hombre de la mirada triste" es lo último grabado por José en Mägo hasta que no se demuestre lo contrario.

Alberto C. Molina (Twitter: @albertocmolina)

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