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Crítica de Babymetal: Metal Forth

Lo que empezó como un proyecto que no sabías si tomarte muy en serio hace unos años se ha convertido en una realidad tan viral que cada movimiento que realiza Babymetal es mirado con lupa. Lo nuevo de las niponas, ‘Metal Forth’, ya está aquí, y debo decir que el nuevo trabajo de las idols del metal me ha dejado sensaciones encontradas, entre el frio máximo y el descubrimiento de un nuevo sonido que personalmente me fascina.

Como punto a destacar, el título del álbum, que para mí debería haber sido “Babymetal y amigos”, porque de los diez temas del disco, siete tienen colaboraciones de otras bandas o músicos. Esto, en principio, no es malo, pero como todo, tiene un pequeño pero para los fans puros de la banda.

Si habéis seguido la evolución musical de Babymetal con los años, sabréis que el sonido que caracterizaba a la banda en sus inicios ya no está. Esa mezcla de metal con música idol o pop japonesa cada vez está menos presente, y en mi opinión eso es bastante bueno, porque la evolución musical que ha tenido la ha convertido en una banda mucho más madura y alejada de aquellos inicios.

En este nuevo trabajo, ese nuevo sonido embriaga todo de un aura mucho más potente en cuanto a velocidad, fuerza, complejidad en las melodías y en el trabajo vocal de las tres frontwoman, en las canciones sin colaboraciones, claro está.

Hablando de las colaboraciones del disco, debo decir, que, si bien son temas con una gran calidad, no vamos a descubrir ahora “Ratatata” con Electric Callboy o “Metali!!” con Tom Morello, que llevan casi un año sonando en los directos de la banda, no dejan de ser colaboraciones con otros estilos que, para mí, fagocitan el propio estilo de las japonesas, mezclando por ejemplo el electrónico con Electric Callboy, el metalcore con gente como Spiritbox o Slaughter to Prevail, que como algo puntual no está mal, pero para un disco propio me parece demasiado.

El otro extremo son los temas (vamos a llamarlos) “propios”, y aún aquí debo hacer dos apuntes, uno muy bueno y otro no tanto. Debo decir que en este disco he escuchado el peor tema que ha sacado nunca Babymetal, pero también uno de los mejores. Es curioso, pero eso es lo bonito de la música.

No me equivoco si digo que “KxAxWxAxIxI” es la canción más fuera de contexto y de estilo que le he escuchado nunca a las niponas. Una mezcla de K-Pop, rap y una cosa extraña que me hizo tener los ojos abiertos los minutos que dura preguntándome que narices era eso que pasaba por mis oídos.

Pero la vida no te quita sin luego darte, y de repente llega “Algorism”… Qué maravilla de tema, musicalmente bestial, rápido, bello, con una Su-Metal en la voz impecable, y “White Flame”, que me da mucha esperanza si este es el estilo que van a tener las japonesas en el futuro.

Si estás descubriendo a Babymetal ahora, no tomes este disco como una piedra de toque, ya que, para mí, es un álbum de transición con muchas colaboraciones, con estilos muy variados, pero con un esbozo de lo que puede ser el futuro musical de la banda.

Escucha ‘Metal Forth’ en Spotify:

Redacción

2 respuestas

  1. El kawaii metal es tan realidad como los demás estilos, el error de muchos metaleros es despreciarlo y decir que todo lo que se hace en Japón es igual, cuando hay bandas femeninas como por ejemplo Lovebites, Mary´s Blood, Band-Maid, o Fate Gear, que tienen mucha calidad.

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