Pocos rincones habrá más emblemáticos dentro del ocio nocturno de la capital que la sala de fiestas Teatro Barceló, también conocida popularmente como Pachá Madrid, al haber albergado durante años esa emblemática marca. El Ayuntamiento ha ordenado cerrar el local por exceso de aforo, una decisión que ha puesto en pie de guerra a los empresarios del sector, pero que no ha afectado a la sala But, que forma parte del mismo edificio.
En concreto, tal y como informaba El País, la Agencia de las Actividades, dependiente del Área de Urbanismo, sancionó a la sala por haber excedido en dos ocasiones el aforo permitido. Esta clausura se prolongará durante todo un año, en caso de que no prospere el recurso presentado para intentar evitar el cierre total.
Los hosteleros afirman que el Consistorio mantiene los mismos límites de aforo desde los años noventa, pese a que los técnicos avalan la entrada de más personas. En la capital dicho baremo no responde únicamente a criterios de seguridad, sino que también depende del barrio en el que el establecimiento abra sus puertas.
Aprovechando la revisión de las normas urbanísticas por parte del Ayuntamiento de José Luis Martínez Almeida, los hosteleros han pedido acabar con esta disparidad de criterios, pero las asociaciones vecinales temen que un aumento de los aforos acabe empeorando los problemas de ruido de muchos barrios.
Desde Noche Madrid, patronal de ocio y espectáculos, decían lo siguiente: “Denunciamos la arbitrariedad de las actuaciones de la ADA y la regularidad que supone que, sin ningún tipo de criterio objetivo a la hora de calcular el aforo de los locales de acuerdo con sus condiciones de seguridad, imponga sanciones a los establecimientos públicos de forma irregular, arbitraria y desproporcionada”.
Al parecer, la vicealcaldesa de Madrid, Inma Sanz, detalló que los excesos de aforo se registraron en diciembre de 2022, con más de 1.500 personas (el máximo era 990), y en febrero de 2023, con un exceso también de más de 1.500 personas. Según explicaba Sanz, cada sanción lleva seis meses de cierre, por lo que la clausura se prolongará durante un año.
- Tom Morello (Rage Against The Machine) espera publicar canciones inéditas de Audioslave “realmente geniales”: “Probablemente haya como un álbum entero” - 30 noviembre 2025
- Mikkey Dee (Scorpions, Motörhead) manda un mensaje a los fans de Obús ante su concierto especial en Madrid: “¡Patead unos cuantos traseros!” - 30 noviembre 2025
- Chino Moreno recuerda un divertido encuentro con Madonna, propietaria de la primera discográfica de Deftones - 30 noviembre 2025
Un comentario
Mientras no cierren salas rockeras este garito pijo me da igual.