¿Qué nos podrías contar acerca del título ‘Sentitu Bahitu Kateen Hotsak’?

“El título se traduce como “Si hubieses sentido el sonido de las cadenas” y hace referencia a la crítica destructiva y a la falta de entendimiento o a la ausencia de voluntad de entender de ciertos sectores de la sociedad en la que vivimos. Por concretar más, hace referencia a ciertas vivencias invisibilizadas y cuyas heridas no están curadas.

A veces se pretende empezar desde el momento presente sin tener en cuenta que hay heridas que se abrieron en el pasado y que siguen sangrando. Heridas que en su medida trajeron las vivencias relacionadas con el miedo. Por eso, a veces al menos, es el mismo recuerdo, cuando se hace una memoria integral, el que cura la herida, ya que las generaciones nuevas han vivido otro tipo de cuestiones y seguramente hay falta de entendimiento en torno a ello.

Cuando se consiga recordar sin que duela se agilizará parte del peso. A veces se pretende no mencionar el pasado, pero es ese mismo pasado el que ha hecho que el presente sea tan doloroso como es. Son heridas sin cicatrizar y opino que no es conveniente pasar la hoja de la manera más dolorosa que existe, es decir, hacer como si no existiera ese dolor. Es un tema muy serio y muy extremo”.

Veo cierta diferencia entre este trabajo y el anterior ‘Ilunari Argia’. ¿A qué se ha debido esta evolución?

“Seguramente al fin de la pandemia y a empezar a socializar mas. La pandemia era un momento en el que sentía vulnerabilidad. Aparte de eso, para mí este nuevo álbum ha supuesto dejar atrás la parte más amarga y cruda de una depresión, y eso en la música también se nota, ya que los sentimientos y emociones han cambiado mucho en mi caso. Esas dos cosas y la motivación de hacer algo nuevo”.

Sin duda uno de los aspectos llamativos sería la ausencia casi total de voces guturales, que solo aparecen en “Ez Gaituzte Honetarako Hezten”. ¿Por qué? ¿Es este recurso algo ya del pasado?

“No, me gustan mucho las voces guturales, incluso escuchar varias canciones seguidas con voces guturales, e incluso álbumes completos. Pero a la hora de componer mi música, para mí es un recurso para canalizar rabia, falta de comprensión, dolor, fuerza, impotencia...Y a la hora de componer este álbum han tenido más lugar otro tipo de sentimientos. Creo que por eso no me he extendido en las voces guturales. Salieron en una canción y en las demás han tenido lugar las voces melódicas”.

Creo que abordas en este disco temas desde la reconexión con uno mismo hasta la voluntad de ser libre, entre muchos otros. ¿Te inspiró la pandemia o cómo surgió semejante cascada de ideas?

“Sí, el fin de la pandemia me ha llevado a pasear por las montañas y a sentir, valorar y apreciar muchísimo la libertad que siento en medio de la inmensa naturaleza. La verdad es que me quedo boquiabierto muchas veces.

Lo de la voluntad de ser libre es algo que va con mi personalidad. He vivido muchas cosas en las que me he sentido preso. Preso de una situación, preso del miedo, dificultades lingüísticas, tratar de encajar donde no encajaba, etc.”.

Diría que en este álbum los franceses Alcest han sido una influencia importante. ¿Es así? ¿Qué otros nombres has tenido presentes a la hora de componer?

“Con todo mi respeto para Alcest, la verdad es que nunca he escuchado su música. Un día de estos la escucharé. Creo que puede haber influencias de Napalm Death, Anestesia, Su Ta Gar, Latzen, Iron Maiden, música hardcore, algo de folk, rock, jazz... Al fin y al cabo eso es lo que más he escuchado durante mi vida”.

Otro dato reseñable es la escasa duración de las canciones, algo también evidente en los trabajos anteriores. ¿Te dará alguna vez por hacer un corte de cinco minutos?

“Para cuando tengo el tema encaminado, lo suelo dar por bueno y quedo contento con el resultado. Me gustan los temas largos también, pero de momento me han salido así. Creo que vivo con un poco de prisa. Quizá en el futuro me aventure a hacer algo más extenso”.

Por cierto, la portada es impresionante. ¿Quién la hizo?

“Angga Waisma. Es un ilustrador muy bueno. Le comenté la idea y la fuimos puliendo hasta el resultado final. He quedado muy contento con la portada, conecta mucho con la música y las letras”.

Recientemente has sido fichado por el sello Sliptrick Records. ¿Es un subidón, no? ¿Cómo entraste en contacto con ellos?

“Sí, es un subidón. Me contactaron ell@s y se mostraron interesad@s en publicar el primer álbum. Va a ser el primer trabajo de Enbor Arnasa que esté publicado en formato CD, con su libreto, fotos, etc. Saldrá el 14 de febrero de 2023. Para mí es una gran oportunidad. Muy agradecido”.

Por último, ¿hay planes de presentar este álbum en directo?

“De momento estoy un poco agobiado con el tiempo y con el dinero. Tendría que verlo claro para apostar por hacer directos y a poder ser no tener que presentar la música de Enbor Arnasa en formato solista. Un cuarteto estaría potente.

Para mí, preparar un directo con esta música requiere mucho tiempo y esfuerzo. Pero si en algún momento se ve viable, en cuanto a energía y gastos, sería una gozada.

¡Muchísimas gracias por la entrevista y hasta pronto!”.

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Alfredo Villaescusa

Eclecticismo en vena. No hay nadie que no dispare el viernes por la noche, ni hay quien esquive los disparos.

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