Crónicas

Crónica de Tarque: Hard and Roll visceral

«Estamos de enhorabuena, Tarque ha vuelto a las raíces de los primeros M-Clan»

22 diciembre 2018

Sala But, Madrid

Texto: Jose Luis Martín Fotos: Marta García Paniego

Segunda fecha consecutiva en Madrid de Tarque, aunque fue la primera en anunciarse y agotarse, añadiéndose posteriormente una el día anterior, y segunda ocasión que teníamos de ver a la nueva formación de la banda del cantante, tras el concierto de calentamiento y para unos pocos privilegiados en la sala Siroco.

Mucha expectación y una sala hasta los topes para ver la presentación oficial en la capital del proyecto en solitario del vocalista de M-Clan Carlos Tarque, que se ha hecho acompañar de un escudero de lujo como el guitarrista de Fito & los Fitipaldis y ex Sangre Azul Carlos Raya, que además también es el productor de los murcianos.

La base rítmica la completaban el bajista Iván "Chapo" González y el batería Eduardo "Coki" Jiménez, músicos que le han acompañado en los últimos años. Pasaban diez minutos de las nueve de la noche, y tras la intro a ritmo de "I love rock and roll" de Joan Jett, aparecían los músicos en el escenario para arrancar con "Ahora y en la hora", con una gran ovación en toda la sala. La conexión con el público fue máxima desde los primeros compases, y siguió con "Heartbreaker" o el pegadizo "Bailo", que comenzó tras presentar a los músicos que le acompañaban y con los que realmente se siente muy a gusto.

Para "Juicio Final", contó con las palmas de un público muy entregado, que se sabía las letras de las canciones de principio a fin. El inicio muy a lo The Who con esa pegada de batería, nos introducía en la hard rockera "El diablo me acompañará". El magnífico sonido del redoble nos daba paso a la primera versión de M-Clan como era "Perdido en la ciudad", primer tema que compuso Tarque para los murciélagos, dentro de su ópera prima 'Un buen momento', que fue muy coreada, destacando la labor de Raya con su guitarra y el slide.

La primera mención a sus referentes internacionales llegó con una excelente versión del "Fire and Water" de Free, donde "Coki" tuvo su momento de lucimiento con su enorme pegada, para poner un poco de calma en el ambiente con la balada "Lobo solitario" que fue seguida con mucha atención.

"Janis, Amy, Billie" nos volvía a traer el ritmo a la sala, con ese aire a la Creedence Clearwater Revival, que incitaba al baile y a la fiesta. Tarque nos recordó que era el cumpleaños del Chapo González y alentó para que se le cantara el cumpleaños feliz.

La bluesera "Se hizo la noche cuando te conocí", que figuraba en el álbum 'Para no ver el final’, fue la siguiente de M-Clan en llegar y donde Raya nos deleitó con un punteo de guitarra realmente fascinante, de esos que te dejan con la boca abierta y que sacan lo mejor de su lado más rockero.

Siguieron con la adaptación al castellano del clásico de Cactus "Evil", bautizada aquí como "Peligro", para rendir un bonito homenaje al carabanchelero Rosendo Mercado, que se despedía de su carrera en Madrid este pasado jueves, con “¡Qué desilusión!”.

Después Tarque nos comentaba que Armando de Castro se encontraba en la sala, y que había comprado su entrada, aunque le podía haber pedido un par de invitaciones (Tarque nos contó después del concierto que se habían preparado el "Incomunicación" de Barón Rojo).

Para el final se dejaron la intensa "Cactus en el corazón" otra de M-Clan, "Calle sin luz", en la que Tarque bajó al patio y se mezcló entre el público mientras era jaleado, y terminaron con la acedeciana "Electroshock", que puso a todos los seguidores al borde del éxtasis.

No tardaron mucho en volver para darnos la propina en forma de bises, con la última de los murciélagos "Miedo", y con la vibrante "Donde nace el corazón", que fue un perfecto colofón a una actuación intensa, pletórica y llena de feeling.

Estamos de enhorabuena, Tarque ha vuelto a las raíces de los primeros M-Clan, Raya se ha involucrado en el proyecto, soltándose la melena con la guitarra y "Chapo" y "Coki" han sido las piezas que han hecho encajar perfectamente esta maquinaria de hard & roll visceral.