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Vince Neil (Mötley Crüe) sufrió tres ictus antes del más grave: "Fui de la silla de ruedas al andador y de ahí al bastón"

Los problemas de salud por los que ha pasado en los últimos meses el vocalista de Mötley Crüe, Vince Neil, llevaron a un largo parón en la actividad programada por la banda, despertando la preocupación de sus seguidores. El pasado mes de agosto, Neil volvía a subirse a un escenario y finalmente se hacía público que había sufrido un ictus. Ahora, el vocalista ha explicado que sufrió tres ictus antes del que fue definitivamente más grave, entrando en detalle sobre el proceso al que se ha enfrentado: “Fui de la silla de ruedas al andador y de ahí al bastón

Estos detalles sobre los complicados meses que ha vivido Vince Neil este año han llegado con la participación del vocalista en el espacio de SiriusXM "Trunk Nation With Eddie Trunk”, donde comienza llevándonos al inicio de todo el problema en las pasadas navidades: “Era la noche de Navidad y me fui a dormir. Me desperté y no podía levantarme de la cama. Pensé: “¿Qué está pasando?” No podía mover la pierna izquierda ni el brazo izquierdo. Así que tuve que pedir ayuda para levantarme de la cama. No podía impulsarme para ponerme cómodo en la cama. Necesitaba ayuda”.

El relato continúa repasando los duros cinco meses de pelea: “Poco a poco, recuperé la sensibilidad en las piernas. Tuve que aprender a caminar de nuevo. Pasé de la silla de ruedas al andador, al bastón... Ahora puedo caminar, pero durante cinco meses fue un proceso intermitente, sin saber qué iba a pasar”.

Vince recuerda, como ya le contó a sus seguidores, que los médicos le comentaron que sería complicado volver a actuar tras anunciar las primeras cancelaciones en los planes de Mötley Crüe: “El médico me dijo que probablemente no volvería a subir al escenario. Y yo pensé: "No, amigo. No lo puedo permitir”. Así que me esforcé al máximo para volver a estar en forma y poder subir al escenario. Me entristeció mucho tener que cancelar esos conciertos, pero aún no estaba preparado. No estaba preparado para volver al escenario. Fue muy triste, pero ahora ha merecido la pena, porque puedo subir al escenario y cantar y hacer todas esas cosas tan buenas”.

Los detalles llegan entonces sobre cómo descubrió que lo que le pasaba era un ictus: “Rain (su pareja en aquel momento) tiene una tía que es enfermera, y la llamó y le dijo: “Esto es lo que le pasa a Vince”, y le respondió: “Ha sufrido un ictus”. Y para entonces ya era demasiado tarde para ir al hospital, porque hay que llegar en menos de 12 horas o algo así. Y yo pensaba: “Oh, se me pasará. Se me pasará”. Pensé: “Bueno, volverá en un rato”. Pero no fue así. Sí, esa fue la parte difícil. Luego fui al hospital. Me dijeron que había tenido un ictus y me dijeron: “No podemos hacer nada por ti ahora porque ya lo has tenido y ha pasado el tiempo”, en el que te dan ese medicamento que hace que no te quedes entumecido en ese lado”.

Un coágulo que empezó en la pierna parece haber sido el causante: “Me dijeron que tenía un coágulo de sangre en la pierna que se extendió hasta el cerebro. Y me lo mostraron: vino un neurólogo y me hicieron radiografías y otras pruebas, y se veían marcas en mi cerebro. Me dijeron: “Ves, ahí es donde tuviste el ictus””.

La alarma tuvo que ser especialmente aterradora para Neil, ya que perdió a su padre hace cuatro años tras sufrir un ictus: “Murió de un derrame cerebral. Lo trasladé a Nashville, justo al lado de mi casa. Y estaba bastante mal. No podía hablar. Era muy triste. Necesitaba un asistente que lo ayudara, una silla de ruedas motorizada y otras cosas. Luchó contra ello, pero el ictus acabó con él”.

El vocalista comenta su sorpresa cuando le dijeron que ya había pasado por tres ictus antes del que fue más grave: “Había sufrido cuatro accidentes cerebrovasculares a lo largo de los años. Dos de ellos ni siquiera los noté. Uno fue un mini ictus que me hizo perder la sensibilidad en la mano. Y eso fue todo. Lo superé bastante rápido. Pero el último fue grave”.

Neil explica cómo pudieron ver eso los médicos: “Pueden verlo en tu cerebro. Hay cicatrices justo en el lugar donde ocurrió. Tenía cuatro marcas en el cerebro y el neurólogo dijo que todas eran de accidentes cerebrovasculares. Yo no recuerdo ninguna otra ocasión en la que me sintiera raro o algo así. Debió de ocurrir y lo superé. Ni siquiera lo sabía”.

Entonces, explica cómo ha sido el proceso de recuperación a base de mucho trabajo: “Mucha fisioterapia. Al principio fui a un centro en Nashville durante diez días, y allí trabajaron conmigo desde el principio para recuperar la memoria. Después contraté a un fisioterapeuta para que viniera a mi casa todos los días. Era un fisioterapeuta que trataba a jugadores de fútbol americano y gente así. Así que me hizo correr y hacer ejercicios en la escalera, la escalera en el suelo, corriendo de un lado a otro, dándome masajes en la mano y el brazo. Pero me ayudó a recuperarlo todo. Me ayudó a superar todo esto”.

El regreso a los escenarios era el momento más esperado, y Vince que que incluso se precipitó: “Tenía varios conciertos programados, también con la banda en solitario, que cancelé. Luego volví e intenté hacer tres conciertos en solitario. Y todos salieron bien, pero debería haberlos cancelado también. No estaba preparado al cien por cien para volver a los escenarios. Era demasiado pronto para mí, y pensé: “Tengo que recuperarme más”. Ahora estoy al noventa y cinco por ciento. Me gustaría recuperar ese cinco por ciento restante... Tenía muchas ganas de prepararme para la residencia en Las Vegas. Todavía hay cosas que no puedo hacer en el escenario. Es difícil correr de un lado a otro en ese escenario. Es enorme. Pero me estoy acostumbrando”.

Vince termina explicando por qué no se dijo desde el principio el problema al que se enfrentaba: “Simplemente dije: “Digamos que es un problema médico y que he tenido que cancelar”, y dejé que la gente sacara sus propias conclusiones. Pero luego decidí que probablemente era el momento de decirle a la gente lo que era. Así que concedí una entrevista a John (Katsilometes, del Las Vegas Review-Journal), y se lo conté. Y se corrió la voz. Fue una locura”.

Redacción

Un comentario

  1. Menuda anécdota por parte de el gran Vince Neil y su mala experiencia tras sufrir este ictus. Menos mal que hoy en dia se puede ver sobre un escenario y bien de voz.

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