VIÑA ROCK: DIARIO DE A BORDO

2 mayo, 2011 7:05 pm Publicado por  – 3 Comentarios

Tras un pistoletazo inicial pasado por agua, el segundo día del festival VIÑA ROCK no pudo ser de otra manera. El agua no cesó y siguió haciendo mella, incluso en mayor medida, hasta tal punto de llegar a crear enormes balsas de agua y fango tanto en la zona de acampada como en la propia “arena” de los escenarios.

Los aquí presentes, al menos los compañeros de otros medios con los que hemos podido hablar, tenemos un sentimiento agridulce hacia la edición de este año: por un lado, sigue siendo una experiencia única cargada de buena música, buen ambiente y buen rollo… por otro, la organización -poca seguridad, escasez de baños, fuentes, refugios, etc.- y el mal tiempo ponen el sabor amargo al festival.

SÁBADO

A eso de las 19H30 nos disponemos a ver a GATILLAZO en el escenario Villarrobledo. Cuando la banda vasca salta al escenario, el temporal estaba en su mayor auge y la asistencia de público no era muy elevada -al menos en las primeras filas, puesto que muchos de los asistentes se refugiaban de la lluvia en las carpas del recinto-. Puro punk el de este grupo, capitaneado por Evaristo -ex cantante de La Polla- que dejaron caer temas como “Pijos powers” y “Sangre y mierda” mientras estos animaban a la gente a unirse al concierto cuando la tempestad parecía amainar. Siguieron con “África”, donde la gente comenzó a animarse y responder ante las llamadas del grupo. Culminaron la noche con cánticos reivindicativos contra la policía, los abusos de poder y las injusticias.

A las 20H30 el equipo enviado para cubrir el festival se divide en dos con el fin de poder cubrir, por un lado el concierto de THE LOCOS en el escenario Naranja, y por otro el de ANGELUS APATRIDA en el escenario Metálika.

THE LOCOS, la banda  madrileña capitaneada por Pipi -segundo cantante de Ska P-, caldeaba el ambiente antes de saltar al escenario con una intro que hacia alzar las manos a todos los punkys allí presentes. Irrumpieron en escena con “Paletovisión” y siguieron con “Don’t worry, be happy”. Pipi se disfrazó de policía para el tema “Malo Juanito”, y tras finalizar este, tiro al público el atuendo que lució para dicha ocasión. Cayeron temas como “Lloviendo idiotas” o  “Norteamérica” mientras bromeaban con el público acusándoles de ser los responsables de la lluvia y el mal tiempo. Cerraron la actuación con “Como un animal” acompañando dicha canción de un “side war” -guerra de lados-.

Al mismo tiempo, ANGELUS APATRIDA -nativos de Albacete- estaban descargando su repertorio para el público metálico. Debo decir antes de nada que tengo un enorme respeto y admiración por esta banda; derrochan calidad y humildad por cada poro de su piel -no hay más que verles colocar su propio equipo y saludarse con complicidad entre ellos mismos al comienzo del bolo-. Comenzaron con “Clockwork”, tema que da nombre a su último disco, para continuar con “Blast off”. El público poco a poco iba aumentando al ver la potencia y técnica de la banda, y es que estos chicos saben animar muy bien a sus fans haciendo círculos de pogos y guerras de lados como la del tema “One side, one war” -hasta tal punto caldearon el ambiente que, algún eufórico, tiro una zapatilla a Guillermo, cantante y guitarrista del grupo-. Cayeron temas como “Devil take the hindmost”, “Fuck you” y “Versus the world” con el único objetivo de que no acabase esta guerra. Una actuación con grandísimo sonido pero con 5 minutos menos de lo previsto, por lo que se vieron obligados a cerrar con “Trash attack” y recordando al público asistente que, “aunque el camino han sido 11 años llenos de mierda, ahora hay una escena thrasher irrumpiendo con fuerza en España y por la que apuestan sellos discográficos multinacionales”. ¡¡¡ENORMES ANGELUS!!!

Era el turno de RULO Y LA CONTRABANDA en el Villarrobledo a las 21H30, y con este, el comienzo de los conciertos“grandes” -70 minutos de duración-. Tras sonar la intro saltaron a escena los 5 músicos con el tema “No sé”. Sorprendente la capacidad expresiva y voz tan peculiar de Rulo, el cual gesticula y siente cada uno de los versos de sus canciones. Algo que, personalmente no me gustó mucho, fue la cantidad de temas que tocó de su paso por La Fuga -“Pa’qui pa’lla”, “Majareta”, “Buscando en la basura”, “Jaleo”… - ni la presencia de 3 guitarras -Rulo uno de ellos cuando apenas hacia uso de la misma-. Súper comunicativo con los espectadores, no dejaba de desgranar temas de su primer LP en solitario, de entre los cuales “Mi cenicienta”, “Heridas del rock and roll” o “Tranqui por mi camino” fueron los más aclamados.

Así llegamos a las 22H45, turno para ÁNGELES DEL INFIERNO en el escenario Metálika. Saltan a las tablas con una potencia sonora abrumadora, abriendo con “El principio del fin” que funden con “Todos somos ángeles”. Anonadado me dejó su vocalista Gallardo -salvando las distancias, nuestro “Halford” español-, al cual parecen no pasar los años por el siendo capaz de defender perfectamente en directo temas complejos llenos de cambios vocales y registros agudos. Destacar el show “especial” que llevó la banda para proyectar sobre las pantallas del recinto -animaciones y efectos propios-. Caían temas como “Rocker”, “Con las botas puestas”, “666” o “Fuera de la ley” para cerrar la actuación con el consagrado himno “Maldito sea tu nombre”.

Increíble fue la ASISTENCIA MASIVA de público para ver  a SOZIEDAD ALKOHOLIKA -la banda con mayor expectación en estos dos días-, a las 00H00 en el escenario Villarrobledo. Al igual que ayer mencionaba la pulcra exactitud de los horarios de empiece y final, esta vez hubo desbarajustes que nos impidieron ver el inicio de la actuación puesto que aún estaban culminando la suya Ángeles del Infierno. La banda salió directa a matar, poco dicharachera con “Palomas y buitres” o “Tiempos oscuros” al inicio del show. Destacar sin duda alguna la barbarie rítmica de su batería Rober, que puso al público patas arriba. Tocaron temas como “No”, “Shaktale” o “Sin Dios” para cerrar con “Motxalo” y “Nos vimos en Berlín”.

Llegamos a la recta final de las actuaciones en el Metálika; esta vez era el turno de los asturianos AVALANCH a eso de las 01H15. En rasgos generales, tuvieron un comienzo de show flojo debido a problemas con los acoples sonoros y el barullo procedente del escenario Naranja. Empezaron con clásicos como “Lucero” o “Xana” donde pudimos ver a un Ramón totalmente entregado a su público luciendo una camiseta de los propios Angelus Apatrida. Hubo una buena asistencia de público a pesar de que la banda ofreciera un show demasiado “light” -apenas tocaron temas de su último LP o grandes himnos como “Torquemada”, “El ángel caído” o “Niño”- y su cantante tuvo una mala noche repleta de entradas a destiempo y desafines en las líneas vocales mas complicadas. Sonaron temas como “Otra vida”, “Mil motivos”, “Alas de cristal”, “Aun respiro” o “Pies de barro” antes de cerrar con la grandísima “Lágrimas negras” -para mí, lo mejor de todo su show-.

Y cerraban la noche en el Villarrobledo a las 02H30 la banda hardcorera RATOS DE PORAO. Tuvo una buena asistencia de publico, en mayor medida por el interés que despertaron con su brutalidad tras el comienzo del show, pero para nada fue la esperada para tratarse de una de las bandas mas importantes en el metal brasileño -lugar de procedencia de la banda- junto a Sepultura o Angra. Al igual que sus “compatiotras” de género en la noche anterior, Madball, fue un show repleto de adrenalina y pogos.

TEXTO: BMC & FERNANDO GARCÍA

FOTOS: PABLO RODRÍGUEZ & FERNANDO  GARCÍA

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