Saratoga: 15 años de 'Agotarás', el disco que marcó una época en el heavy metal español
Blog: Mariano Muniesa
2 marzo, 2017 1:54 pm 2 Comentarios
Hace unos días tenía la oportunidad de escribir un blog acerca de la trascendencia histórica que supuso la edición en 1982 del segundo disco 'Volumen Brutal' de Barón Rojo, por cuanto ese disco simbolizó toda una época del Heavy Metal en España, estableció un modelo, creó un referente y con los años, de generación en generación su carácter de clásico imperecedero no ha hecho sino crecer. Salvando las distancias y en otro contexto musical y social completamente distinto, en 2002, 'Agotarás', el quinto disco de estudio de Saratoga, es un clásico de la historia del Heavy Metal español al nivel de 'Volumen Brutal', que marcó toda una época, que llevó a la banda a conocer su momento de mayor popularidad en todo el país y se estableció como el álbum no sólo del año, sino probablemente de una década en la que al menos entre el 2000 y el 2007, el rock duro español volvió a vivir unos años de auténtica gloria.
La travesía del desierto
Cuando Saratoga se creó en el verano de 1992, no puede decirse en modo alguno que el Heavy Metal estuviera atravesando un buen momento en España. Lejos quedaban los años de expansión y de crecimiento del género en los 80, tanto a nivel nacional como internacional eran otras las tendencias que dominaban el panorama, y aunque la presencia de dos verdaderos pesos pesados de nuestro rock, como Jero Ramiro y Niko del Hierro al frente del proyecto lo convertía de facto en un "supergrupo", máxime cuando se supo a los pocos meses de formarse que Fortu, cantante de los por aquel entonces desaparecidos Obús, sería el frontman de la banda.
A pesar de la edición de un excelente primer disco, el proyecto pronto se enfrentaría a una grave crisis tras la marcha de Fortu para rehacer Obús. La poco afortunada elección de un cantante, Gaby, que no cuajó ni encajó bien en el grupo y cuya aportación fue un disco, 'Mi Ciudad' que se quedó por muy debajo de las expectativas creadas y que se saldó con la marcha tanto de Gaby como de su batería Joaquín Arellano, "El niño". Ese fue el momento en el que Dani Pérez entró como batería y Leo Jiménez tomó el micro como nuevo cantante de Saratoga, conformándose así la formación clásica del grupo, la que les daría mayores éxitos y la que grabó 'Agotarás'.
Sin embargo, antes de 'Agotarás', esta formación grabó un disco que bien podría considerarse un disco de transición, una suerte de ensayo general de lo que sería después 'Agotarás'. Ese disco, 'Vientos de Guerra' ya mostraba a un grupo distinto, a un grupo que se mostraba más sólido, sobre todo, más en conexión con ese creciente fenómeno de expansión del Heavy Metal europeo que en ese año de 1998, en el cual grupos alemanes como Gamma Ray, Edguy, Blind Guardian, Running Wild, Primal Fear o Helloween, escandinavos como Stratovarius o italianos como Rhapsody empezaron en ese año a dominar la escena a nivel internacional.
Hacia el verano-otoño de 2001 Saratoga empezaron a preparar la grabación de este disco. Un disco del que, por diversas circunstancias, participé y conocí casi desde su gestación. A finales de septiembre de 2001, hice una fiesta de mi programa de radio, Rock Star en la Casa del Loco de Zaragoza, en la que Saratoga fueron los protagonistas, y ya en ese concierto -personalmente hacía tiempo que no había vuelto a ver a Saratoga en directo- me di cuenta que la banda era dinamita pura. Leo Jiménez era ya ese cantante llamado a ser ese líder carismático que hoy es, su extraordinaria potencia era impresionante, la base de ritmo de Dani y Niko era sencillamente aplastante, bestial, y Jero tocaba con una energía y una destreza verdaderamente descomunal. Me llamó la atención de que al acabar el concierto, Jero me dijo que saldríamos en la furgo hacia Madrid a las 9 en punto de la mañana. "¿Por qué tan temprano? mañana es domingo ¿no?" -les pregunté - "Ya, pero es que queremos llegar a comer a Madrid y dedicar toda la tarde a trabajar el nuevo disco, que nos lo estamos currando muchísimo"- me contestó el guitarrista.
En ese viaje de Zaragoza a Madrid, además de las mil y una preguntas que me hizo Leo sobre infinidad de grupos -hablar de heavy metal con Leo Jiménez es una gozada, te puedes tirar horar y horas comentando grupos con él- al notar el interés y hasta la preocupación con la que hablaban sobre este disco, decidí profundizar en la conversación, preguntarles sobre este disco, y recuerdo a la perfección las palabras de Niko. "Es que tenemos la sensación de que es ahora o nunca. Ahora el Heavy está funcionando otra vez, la banda está consolidada, fuerte, llevamos juntos ya casi cuatro años juntos y ahora es el momento". Es decir, Saratoga eran conscientes que por el momento que se estaba viviendo y por la propia situación interna de la banda, este disco podía ser la gran oportunidad de convertirse en ese grupo grande de verdad. Llegaron a tener maquetados 40 temas y toda la banda dedicó meses y meses a pulir los temas, trabajarlos y dejarlos listos para grabar.
El triunfo de la voluntad
Tras esos meses de trabajo exhaustivo y una grabación muy intensa, por fin, en la primera semana de marzo de 2002 se puso a la venta 'Agotarás'. Tuve el inmenso privilegio de que la noche anterior a su puesta a la venta, la banda me ofreciera la primicia de presentar el disco para toda España en mi programa de radio Rock Star y toda vez que lo escuché ya entero en casa, me di perfecta cuenta de que ese disco era una auténtica obra maestra. Estaba convencido de que en efecto, esta vez sí, Saratoga habían hecho el disco de su vida. Heavy Metal potentísimo, con un empaque y una calidad extraordinaria, un sonido plenamente equiparable a lo que se hacía en Europa, y lo más importante, y lo que creo que fue lo que confirió a este disco ese marchamo de masterpiece: se notaba que estas canciones eran el fruto de un trabajo colectivo hecho a conciencia, en especial por como estaba tratada la voz de Leo.
Niko del Hierro (izq.) y Leo Jiménez (der.) en directo en la extinta sala Aqualung de Madrid durante la gira presentación de 'Agotarás' (2002)
Los temas que habían grabado para 'Vientos de Guerra', en su gran mayoría eran temas compuestos o montados en la época de 'Mi Ciudad' y por tanto, no sabiéndose quien iba a tocar la batería o quien iba a ser el cantante, aun siendo buenas canciones, no transmitían esa sensación de homogeneidad, de solidez que contenían todos los temas de 'Agotarás' en su conjunto. Ahora en cambio, todas las canciones se habían trabajado por toda la banda, la aportación de las nuevas influencias que Dani y Leo traían enriquecían la propuesta y ello se notaba, y mucho, en comparación con su trabajo anterior.
En 2002 además de las bandas de Heavy Metal internacionales, en España se había constituido un elenco de grupos que venían a ser la traducción en nuestro país de ese movimiento de Heavy-Power-Metal que ya eran una firme realidad en la escena rock de este país. Por supuesto, Mägo de Oz bien podían ser los líderes de ese movimiento, pero ya en ese momento habían entrado en otro status, y en ese contexto, grupos como Avalanch, Tierra Santa, Ankhara, Lujuria, los reunificados Muro y los renovados Obús habían creado una escena de metal estatal propia muy potente y muy interesante. Pero ninguno de estos grupos, aun cuando hacían trabajos en estudio excelentes, había hecho un disco que pudiera ser el referente natural a todo este movimiento, el disco que simbolizara ese momento como hizo 'Volumen Brutal' en 1982 o 'No hay tregua' de Barricada para el rock estatal en 1986.
'Agotarás' fue ese disco. El disco que refleja toda esa época y ese movimiento. La biblia de lo que se dio en llamar "la segunda generación del Heavy Metal español". Y el disco que por fin, diez años después de la creación de la banda, mostraba el verdadero potencial que el grupo poseía, la energía y la fuerza de una formación en la que en se disco se daban la mano la visión más tradicional de Jero y Niko con las nuevas tendencias que Dani y Leo traían al sonido de Saratoga y que con toda justicia y todo merecimiento, tuvo un éxito comercial espectacular y puso por fin a Saratoga en la posición de liderazgo que tantos años llevaban esperando.
Los himnos de la victoria
Cada canción de 'Agotarás' era un himno. Cada tema, una explosión de fuerza, energía y creatividad que sorprendía a cada nueva escucha. Obviamente con el tiempo canciones tan directas, tan a la yugular como "Con mano izquierda", "Las puertas del cielo" o "A morir" han quedado como las más recordadas, aunque "El gran cazador" o "Ratas" eran -y siguen siendo- trallazos absolutamente brutales, junto a un medio tiempo muy melódico como "Oscura la luz", la preciosa balada "Parte de mi", que mostraba a un Leo excepcional encarando otras faceta suya como vocalista o la experimental y sorprendente "Viaje por la mente", piezas verdaderamente inspiradas, un derroche de talento sin precedentes.
Tal vez, y como suele suceder cuando un grupo graba una obra maestra, difícilmente consigue superarla o igualarla, al menos durante sus primeros años. Los discos posteriores, 'El clan de la lucha' y 'Tierra de lobos', sin ser en absoluto discos mediocres, lo cierto es que no llegaron a acercarse a esa genialidad que 'Agotarás' atesoraba. Pero gracias a ese disco, disfrutamos durante varios años de un grupo que con esta formación marcó una época en la historia de nuestra música y que hoy, en otro momento de su historia y con otra formación, sigue teniendo en ese disco una parte vital de su legado como banda emblemática en el Heavy Metal español.
Mariano Muniesa
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2 comentarios
A mi me mola mas mi ciudad y vientos de guerra!
Un discazo inigualable