Para los que no te conozcan, ¿quién es Jon Plágaro? ¿Cuál ha sido tu trayectoria hasta la fecha?

“He dedicado los últimos veinte años de mi vida a la música, principalmente como guitarrista, pero también como artista, compositor, productor, ingeniero y profesor. Mi instrumento principal es la guitarra eléctrica. También toco la acústica y flamenca y me he formado en producción e ingeniería de sonido.

Además, soy profesor de guitarra desde 2009, y a nivel artístico estuve muchos años tocando junto a mi hermano en varios proyectos, llegando a firmar con nuestro grupo Plágaros un contrato discográfico y un álbum llamado ‘A Day, a Family & The Night’, varios singles y videoclips, tanto en inglés como en castellano, con la discográfica Oso Polita de Last Tour y la multinacional BMG, un proyecto que paró la pandemia.

Desde entonces sigo con mi carrera con trabajos personales como ‘Sinfonía’ y mantengo mi actividad musical formando parte del Proyecto Villalacre en un conjunto de gypsy jazz. Además, en breve, anunciaré mi participación en un proyecto de heavy metal”.

¿En qué momento te dio por iniciar este ambicioso proyecto en solitario?

“Empezó como un comentario entre hermanos, el final de una de nuestras canciones no encajaba del todo y mi hermano me preguntó: “¿Por qué no haces una sinfonía?”. Pronto sentí gran curiosidad y vi el potencial que tenía componer una obra en la que no tuviera los límites que normalmente tienes cuando tocas en una banda, como la cantidad de guitarras que puedes añadir a una canción o elaborar ideas artísticas únicamente a través de ella y me puse manos a la obra”.

La estructura en cuatro movimientos guarda fidelidad con el modelo habitual de sinfonía, ¿qué otros aspectos en concreto serían similares y cuáles diferentes en esta obra en comparación con el concepto clásico?

"Si bien es cierto que coincide en el número de partes o movimientos, ‘Sinfonía’ es una obra instrumental que parte de una gran libertad y experimentación. El nombre se referiría a la definición más amplia de esta palabra, un conjunto de voces, de instrumentos, o de ambas cosas, que suenan acordes a la vez".

Creo que has utilizado un octavador en vez de un bajo para reproducir los tonos más graves. ¿Lo de utilizar solo guitarras era más bien una cuestión de militancia?

“Ha sido una forma de tratar de devolverle a la guitarra lo que me ha dado. El reto que suponía y la personalidad que adquiría la obra siguiendo este camino me atraían. Además de la particularidad de este concepto, que no está extendido”.

¿Qué porcentaje habría en este álbum de ideas pensadas de antemano y de improvisación?

“Tenía claras las ideas generales y el desarrollo, pero sobre todo dentro de las partes es donde me di más margen para dejarme llevar. Las cosas adquieren su magia cuando las sacas del terreno consciente”.

Has contado a la producción con todo un ganador de un Grammy como Mikel F. Krutzaga. ¿Cómo entras en contacto con él?

“Trato de ser lo más natural y directo posible. Me puse en contacto con él a través de su web y su respuesta fue muy positiva. A partir de ahí empezamos a intercambiar ideas que fluyeron a la perfección”.

¿Qué hay de la fotógrafa Amaia Ugarte, responsable del diseño gráfico? Creo que ha acertado bastante, sobre todo con esas cuatro portadas diferentes para cada movimiento…

“Su trabajo es fantástico. Ella fue capaz de interpretar las ideas artísticas que forman parte de ‘Sinfonía’ y llevarlas al terreno visual con gran creatividad”.

Diría que este trabajo posee bastante influencia de Cacophony y tengo entendido que incluso recibió el visto bueno de Jason Becker. ¿Cómo fue aquello? Imagino que sería un espaldarazo impresionante, ¿no?

“Sí. Recuerdo intentar tocar sus temas de muy joven cuando hace poco lo había descubierto y estaba maravillado por su música y por él como persona. El mensaje que recibí de él es algo que quedará ahí para siempre”.

 

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¿Hay posibilidad de presentar este proyecto en directo?

“Si tuviese los recursos suficientes, lo llevaría al directo sin dudarlo. Se puede ver y escuchar un ejemplo de la complejidad que conllevaría en un reel denominado “Sinfonía” que podéis ver en mi Instagram”.

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Alfredo Villaescusa

Eclecticismo en vena. No hay nadie que no dispare el viernes por la noche, ni hay quien esquive los disparos.

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