Arrockyo En Vivo o cómo acercar el rock a todos los públicos
Blog: Jason Cenador
24 mayo, 2019 7:11 pm 1 ComentarioEn tiempos en los que la banalidad musical parece ganar batalla tras batalla frente a los grandes focos mediáticos, es más digna de alabar que nunca la labor de aquellos que bregan por acercar el arte emanado del talento, la credibilidad y la pasión a todos aquellos y aquellas que adolecen de la ventura, y tal vez de la posibilidad de un punto de partida, de convivir con él en su día a día.
El municipio madrileño de Arroyomolinos volvió a apostar por el rock y el metal en abierto en un festival completamente gratuito que batió récords de asistencia en su cuarta edición con un cartel que colmó de alto voltaje un fin de semana para el recuerdo. Feligreses de los sonidos potentes y sentidos que nos unen en una misma condición compartieron espacio con familias de la localidad y alrededores, y con asistentes de diversa índole que pudieron empaparse de las propuestas de grandes bandas de nuestra escena y, quien sabe, si absorberlas para plantearse el día de mañana escuchar algo más en casa de lo que las playlist pagadas de Spotify o las listas impuestas de las radiofórmulas conminan.
La cultura es un derecho, una dimensión humana inalienable, y por eso, su disfrute sin contrapartida económica es siempre una magnífica noticia. Lo es más aún cuando desde los entes públicos se fomenta y se apoya de veras, hecho que aunque a veces se antoje quimérico, puede suceder y, de hecho, sucede en el Arrockyo. El principal responsable de ello es el concejal independiente Juan Carlos García, rockero de pro y ávido currante por dinamizar la vida artística de su municipio. Una año más, lo volvió a lograr.
Kiraz | Foto: Sonia Mora
Fue quien suscribe estas líneas quien se encargó de ejercer como maestro de ceremonias dando paso a cada uno de los artistas en la palestra, un honor concedido también por el laborioso equipo de la productora y agencia Wild Punk al que se procuró responder con oficio, lealtad y mucho cariño por el evento.
El talento emergente es otra de las señas de identidad de un festival que apuesta decididamente por el relevo generacional en comunión con la pleitesía a los nombres consagrados. Por eso convoca un certamen de rock joven que este año gozó de mayor participación que en las temporadas anteriores y del que salió vencedor un sorprendente conjunto de fresco, vibrante y variopinto rock and roll, Kiraz, que además contaron con una nada despreciable legión de seguidores. Su concierto entusiasmó y desenmascaró a una divertidísima banda cuya elegancia va más allá de su pintoresca estética.
Deskarte | Foto: Sonia Mora
También en terrenos del talento emergente podríamos encuadrar a los madrileños Deskarte, si bien llevan casi una década bregando por su sincero rock urbano de irremisible pegada y contagioso espíritu. Con letras a caballo entre lo social y unas experiencias emocionales compartidas que calan hondo, los de Usera se reivindicaron como una banda muy a tener en cuenta. Esperemos que se sitúen donde se merecen con el tercer álbum que ya están fraguando.
También Nadye, banda de ágil, vibrante y juvenil rock urbano entrelazado con elementos de punk rock americano, presentó sus credenciales para estar en un escalafón superior del panorama estatal más pronto que tarde. Con el vocalista y bajista Javi Nadye al frente, exhibieron una consistencia y una maquinaria perfectamente engrasada. Temas de su reciente álbum, ‘Intrapolar’, se codearon en el repertorio con otros de discos anteriores en un concierto rebosante de garra e intensidad que echó el candado con inesperadas ráfagas pirotécnicas.
Nadye | Foto: Sonia Mora
La representación internacional la puso SonZ, conjunto de hard rock oriundo de la excitante ciudad alemana de Colonia que logró encandilar al personal con una actuación vigorosa y entregada en la que pusieron de relieve aquello que no hay nada mejor que disfrutar sobre el escenario para que los que se hallan frente a él hagan lo propio.
Mägo de Oz | Foto: Sonia Mora
Cerró la jornada Mägo de Oz, embarcados en una kilométrica gira de presentación de un último álbum, ‘Ira Dei’, que ocupó buena parte del setlist para regocijo de unos y recelo de otros. Al margen de las muchas canciones de este trabajo, el combo madrileño se decantó por completar su show con algunos de sus singles más conocidos por el público ajeno al rock, como “Hoy toca ser feliz”, “Molinos de viento”, “La costa del silencio” o “Fiesta pagana”, dejando en el tintero muchas piezas de enjundia de álbumes pretéritos e imprescindibles que fueron sumamente añoradas.
El concejal Juan Carlos García, en MariskalRock Radio con Jason Cenador
El sábado inauguraron el plantel Pinturillas, un conjunto musical para los más pequeños, que gozaron de lo lindo con sus canciones infantiles y sus coreografías. Fue la enésima demostración de la vocación inclusiva de este evento, confeccionado para el gozo de todas y todos, y una admirable manera de acercar la música a los más pequeños, muchos de los cuales luego vibraron de rebote con la irresistible actuación de Stafas. La banda de Michel Molinera siempre es una maravillosa noticia en directo, una garantía de honestidad, buen hacer y canciones redondas, sentidas y adictivas. Aunque lo apretado del horario constriñó su setlist, emocionaron verdaderamente temas como “Hotel esperanza”, “De clavos y martillos”, “Me he acostumbrado” o “138.252€”, ante la que el siempre directo y afable Michel Molinera arrancó los aplausos del personal con un discurso en memoria de las víctimas del 11-M y en rotunda condena a la barbarie y, sobre todo, a aquellos políticos interesados que la catalizaron y actuaron con inhumano cinismo ante ella.
Stafas | Foto: Maripi
Sin duda, uno de los platos fuertes del festival fue el show de Los de Marras, que a escasos días de la publicación de su directo ‘Sucede’ se irguieron como el grupo más explícito y combativo del fin de semana, con ese rock and roll calado de punk y sin pelos en la lengua que agitó a todos los presentes a lo largo de un concierto soberbio, mordaz y aguerrido. No faltaron temazos como “Poeta”, “Sexo en la calle” u “Hoy”, con la que dieron carpetazo a su potente actuación poniendo patas arriba a todo el recinto ferial, junto al que, por cierto, tenía lugar en una carpa una iniciativa solidaria en el marco de Córtate Madrid.
Muy esperada era la actuación de José Andrëa y Uróboros, y lo cierto es que no defraudó ni un ápice. El vocalista madrileño goza de un envidiable estado de forma y su voz es, a todas luces, una de las mejores que se pueden escuchar sobre un escenario. Arribando a tonos increíbles, con ese timbre que ha fascinado a miles durante décadas y con un saber estar sobre las tablas a años luz de los mortales, el que fuera vocalista de Mägo de Oz – banda de la que no interpretó ni un solo tema a excepción de la adaptada “La canción de los deseos” – dio buena cuenta de los himnos que atesora ‘Bienvenidos al Medievo’, un reciente álbum que el próximo 7 de junio tendrá su presentación oficial en la Sala Cool Stage de Madrid. Temas como “Matar al Rey”, “Una fábula de mí y yo” y “Allá donde estés tú” sonaron brillantes pese a la ventolera, y convivieron con otros anteriores como “Para que nunca amanezca”, una delicia. Por su parte, la formidable constelación de instrumentistas bajo los focos estuvo a la altura, con el Chino y José Rubio deslumbrantes a las guitarras, Sergio Cisneros “Kiskilla” tan magistral como siempre a los teclados, Fernando Ponce de León y Santiago Vokram vibrantes en el apartado folkie, y Pedro Díaz “Peri” y Teto Viejo seguros en los cimientos rítmicos.
José Andrëa y Uróboros | Foto: Álvaro Moreno Martín
El fin de fiesta lo puso La Pegatina, opción ideal para cerrar la velada con el jolgorio, la fiesta y el buen rollo como bandera, con todo un despliegue de confeti, pirotecnia y, sobre todo, dedicación por hacer de aquello un hervidero de sonrisas al son de temas como “Lloverá y yo veré”, “Alosque” o “Y volar”. No obstante, el evento continuaría el domingo con una jornada orientada hacia el público infantil.
Por muchos años más de Arrockyo En Vivo y por muchos más festivales de estas características que, con apoyo de aquellos a quienes el pueblo paga el sueldo, acerquen al susodicho la cultura desde un prisma alternativo, genuino y verdadero. El rock en abierto ha de ser apoyado, aplaudido y venerado.
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1 comentario
No esta nada mal dicho cartel para este festival aunque podrían haber metido a más bandas rockeras porque hay mucha variedad en el.