Entrevista a Twisted Sister: “Quitando EE.UU., España es el país donde más veces hemos tocado”

Hola, soy Juan Destroyer de MariskalRock y la revista La Heavy, ¿cómo estás?

“Muy bien, gracias. Oye, ¿es Juan Destroyer tu verdadero nombre?”

No, es mi nombre de guerra, pero mola, ¿no?

“Sí, desde luego suena muy heavymetalero, Juan”.

El último concierto que disteis fue el 24 de junio en Canadá y no volvéis a tocar hasta el 14 de julio, en Francia concretamente. ¿Entre medias qué has estado haciendo?

“Ahora mismo ando en Barcelona con mi novia, de hecho tuve que acortar un paseo marítimo en lancha para poder realizar esta entrevista. Me encanta esta ciudad, ya he estado aquí más veces como turista”.

Y encima me consta que es un país muy propicio para Twisted Sister.

“Tenemos muchos fans y muy fervorosos, sí. Es curioso, porque antes de la reunión de la banda nunca habíamos tocado en España, pero después hemos estado viniendo constantemente,habiendo dado ya unos diez conciertos y en ciudades diversas: Madrid, Bilbao, Cádiz, Zaragoza… Nos encanta España y le agradecemos de corazón a los fans que nos hayan hecho volver una y otra vez. Creo que, quitando EE.UU., es el país donde más veces hemos tocado desde nuestra reunión”.

¿Fue difícil volver a la carretera tras la muerte de A.J.?

“Sí, fue una decisión muy difícil y tuvimos que sopesar varios factores antes de decidirnos a hacerlo”.

Mike es conocido por ser un batería muy técnico, ¿tuvisteis que pedirle que se tranquilizara con los redobles o sabía dónde se metía?

“Mike creció escuchando nuestros discos, vino a nuestros conciertos cuando era adolescente, es heavymetalero hasta la médula además de uno de los mejores baterías del género y conoce nuestra música casi mejor que nosotros, incluso quería tocar temas que ya no tocamos en directo. Los que no estuvisteis en Barcelona el año pasado y tampoco podéis ir esta vez podréis ver en el DVD cómo se las gasta en directo con nosotros”.

Tenéis uno de los mejores directos del mundo, ¿cuál es vuestro secreto?

“Sinceramente no sé responderte. Cuando veo a otras bandas en directo no sé las razones por las que me gustan o no, es algo que se siente. Tocar en vivo es la única cosa que sabemos hacer y siempre intentamos hacerla lo mejor que podemos. ¿Por qué crees que nuestro directo es uno de los mejores?”

Os he visto dos veces y en ambas habéis sonado tan compactos como vuestro repertorio, que está lleno de clásicos. Además tenéis en Dee Snider a un frontman formidable.

“Hemos dado más de nueve mil conciertos a lo largo de nuestra carrera, creo que es más de lo que han hecho Iron Maiden, Judas Priest, AC/DC… nos gusta tocar en directo y ver a los fans pasándolo bien. A veces pienso que para ellos la banda es algo así como un objeto religioso al que venerar, sobre todo cuando veo las reacciones de los fans españoles y latinoamericanos, por eso nos encanta tocar en esos países”.

Si en tan buena forma estáis, ¿por qué os despedís de los escenarios?

“Cuando nos reunimos en 2001 creíamos que nadie daría un duro por nosotros, pero cuando vimos que los conciertos funcionaban empezamos a ser más optimistas. Cada vez que alcanzábamos el margen anteriormente fijado lo dilatábamos dos o tres años más, así sucesivamente hasta ahora que cumplimos quince dando conciertos desde la reunión. Ha llegado el momento de parar porque queremos dejarlo cuando todavía estamos en forma, no ser como otras bandas, que son lamentables en directo y sólo lo hacen por la pasta”.

Entonces el concierto en New Jersey del 1 de octubre será el último, ¿verdad?

“Lo íbamos a dejar definitivamente hace tres años pero al final no lo hicimos, también estuvimos a punto de parar cuando murió A.J., pero este año celebramos nuestro 40º aniversario y por eso decidimos seguir. Siempre puede que surja después algún que otro bolo benéfico, pero como una banda en gira a la que se puede contratar no lo veo, ya nos hemos mentalizado y el concierto de New Jersey será el último show propio que hagamos”.

¿Qué harás cuando te retires de la música?

“Toco la guitarra en una banda y me encanta lo que hago, pero no me gusta el metal, no lo toco en la intimidad y en cualquier caso no soy músico en sí mismo. De todas formas me definiría más como un guitarrista de blues rock, como demuestro con mi otro grupo, Pink Slip Blues Band, pero no compongo ni con Twisted Sister ni con ellos. Fuera del ámbito musical tengo una columna en la revista Inc. y su página web -es uno de los medios de comunicación sobre negocios más importantes del mundo- y también doy conferencias a empresas sobre cómo motivar a sus empleados y mejorar su rendimiento”.

¿Quién te acompaña en Pink Slip Blues Band?

“El nombre hace referencia al papel de color rosa con el que en tiempos pretéritos en EE.UU. se notificaban los despidos, y es que todos los miembros de la banda fueron despedidos de algún trabajo en algún momento dado de su vida. En la batería tenemos a Michael Cartellone (Lynyrd Skynyrd, ex DamnYankees), en la otra guitarra a Joel Hoekstra (Whitesnake, ex Foreigner), en el bajo está con Bobby Held, que ha sido productor de Joe Bonamassa y Joe Lynn Turner, y también contamos con un par de teclistas de reputación en la escena neoyorquina. Nos dedicamos a tocar nuestras canciones favoritas, pero todo versiones ajenas, nada de Twisted Sister, Whitesnake o Lynynrd Skynyrd”

¿Tenía A.J. alguna dolencia cardíaca o fue su muerte totalmente inesperada?

“Estaba “mucho malo” (en castellano). Tres días antes de morir sufrió un ataque al corazón, pero de eso nos enteramos después de su muerte. Un día antes de morir me llamó y me dijo que le dolía el hombro, pero que creía que era a causa de una lesión en algún músculo o ligamento, de hecho iba a hacer rehabilitación antes de la gira veraniega y quiso tranquilizarme asegurándome que todo iba a salir bien; eso fue lo último que me dijo. Hace un par de años estuvo involucrado en un accidente automovilístico con el autocar de la gira de Adrenaline Mob, creo que se desenganchó el tráiler y se salió de la carretera, pero nadie resultó herido. Si hubiese pasado algo más grave o si les hubiesen llevado al hospital para hacerles un chequeo rutinario, se lo habrían detectado, ya que los médicos nos dijeron que tenía bloqueadas todas sus arterias y eso se nota en un chequeo, obviamente. Me da mucho coraje, no habría muerto si no hubiese sido tan orgulloso. No era un ligamento lo que le dolía, sino su corazón, que le dio un aviso al cual no hizo caso. Una pena”.

La banda en 2014, aún con A.J. en sus filas

No creáis nueva música porque pensáis que es una pérdida de tiempo y energía tratar de igualar el impacto de vuestros clásicos, pero grupos como Aerosmith y Bon Jovi si lograron trascender entre varias generaciones.

“Supongo que te refieres a unos comentarios míos…”

Sí, afirmabas que las bandas que componen nuevas canciones y las tocan en directo son “idiots”.

“Dije que están en su derecho de hacerlo pero que ellas mismas te confesarán que es una pérdida de tiempo, porque los fans no van a sus directos para escuchar los temas nuevos. En el momento que el frontman de una de esas bandas dice: “Va un tema nuevo”, todos corren a la barra o al baño. La mayoría de las bandas famosas, cuando salen a la carretera para promocionar un disco, la primera semana tocan cinco o seis temas nuevos, la segunda tres o cuatro y a partir de ahí un par sólo. Las bandas no quieren admitirlo pero es la verdad; además, ¿quién compra discos hoy en día? Bon Jovi y Aerosmith vendían millones en tiempos, ahora solo una décima parte. Crear música nueva hoy en día, desde un punto de vista empresarial, no es rentable. Aerosmith han anunciado su gira de despedida, Kiss no volverán a hacer discos, y es porque se han dado cuentade que es una pérdida de tiempo. Por nuestra parte, si estuviéramos girando constantemente tendría justificación que grabáramos, pero sólo hacemos unos diez shows al año, así que desde ese punto de vista tampoco tendría sentido hacer un disco nuevo”.

Hace no mucho nos dejó un buen amigo vuestro, Lemmy, que jugó un papel crucial para que se os hiciera caso en Reino Unido. ¿Puedes recordarnos aquella anécdota acaecida en 1982 en un festival de Gales del Norte?

“Habíamos fichado por un sello punk que se llamaba Secret Records y, para que te hagas una idea, tenía a bandas como The Exploited o Cockney Rejects, debían pensar que éramos punk también. Nos metieron en ese festival pero nadie sabía nada de nosotros. Por suerte Motörhead era el cabeza de cartel y Lemmy vino al camerino, ya que le gustaba la banda en directo. Nos vio muy nerviosos pues era un ambiente motero el de aquel festival de Wrexham, así que se ofreció a presentarnos, diciendo de nosotros que éramos buena gente, sus chicos. También subió al escenario cuando tocamos en el Marquee Club dos meses más tarde y tocó con nosotros cuando hicimos el programa deTheTube de la tele de allí”.

Tu madre trabajó para el partido Demócrata. ¿No se te hace raro que Donald Trump usara “We’re not Gonna Take It” en su campaña?

“Ya no lo hace porque Dee le pidió que dejara de usarlo. Es difícil de entenderlo para la gente fuera de EE.UU., pero la legislación no pone barreras a la hora de utilizar música. Si se pagan los derechos de autor correspondientes, se puede usar cualquier tema sin pedirle permiso al propio autor, y es éste quien tiene que escribir una carta pidiendo que no se utilice su tema. Dee y Trump son buenos amigos y fue una decisión difícil por su parte, pero sabiendo que es un personaje controvertido, tuvo que hacerlo”.

¿Cómo te metiste de lleno en el mundo de la música?

“El primer tema que recuerdo haber escuchado en la radio fue, con diez años (ndr: tiene 63), una canción de doo wop llamada “Hey Paula”(Paul & Paula). Por entonces, obviamente no entendía cómo funcionaba la industria musical ni cómo se podía llegar a ser número uno en una radio, ni nada, así que se lo pregunté a mi madre porque creía que todos los países del mundo habían votado para que fuera número uno en las listas; así de ingenuo era. Total, que desde entonces empecé a interesarme por todo lo relacionado con la música, y cuando vinieron los Beatles a EE.UU. aquel acontecimiento cambió mi vida para siempre. Cuando empezaron tenía doce años y se disolvieron cuando tenía veinte, así que ellos marcaron los mejores años de mi vida. Mi madre trabajó con JFK pero no me atrajo la política, sobre todo después de que le asesinaran. Por otro lado mi padre era vendedor de joyas y a un compañero le dispararon para robarle, así que tampoco quise seguir sus pasos. Fueron los de Liverpool los que me mostraron el camino”.

Texto: Juan Destroyer
@juandestroyermr
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