Crónica de Zakk Wylde + Jared James Nichols: Releyendo los libros de las sombras

31 mayo, 2016 3:08 pm Publicado por  Deja tus comentarios

The Forum, Londres.

Esta fecha trajo al escenario del fórum de Londres a dos guitarristas con trayectorias muy diferentes. Como cabeza de cartel, el ya icono de la guitarra Zakk Wylde, con una dilatadísima trayectoria musical; saltó a la fama cuando fue fichado con 21 años por Ozzy Osbourne y grabó con él parte de sus mejores álbumes, para después formar distintos proyectos de entre los que se puede mencionar a Black Label Society como el que más reconocimiento ha alcanzado.

Para abrir la velada Jared James Nichols. Jared es un guitarrista de hard rock con clarísimas influencias “blueseras” que está comenzando sus andadas por escenarios internacionales. Desde luego ha sido un acierto para él acompañar a Zakk en su tour, ya que muy probablemente su nombre nos sea bastante más familiar a los europeos al finalizar la gira.

Lo cierto es que abrir para el señor Wylde con una banda que lleva tu nombre por propio no debe de ser nada fácil y debe de suponer bastante presión. Se podría esperar de él un guitarrista súper-virtuoso de solos interminables, pero la verdad es que esa descripción se aleja bastante de la realidad. Jared ha formado un trío en el que la guitarra es protagonista, pero sigue siendo una contribución a una conversación grupal en vez de un monólogo sobre una base.

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Jared James Nichols abrió el acto con mucho, mucho rock

Su comparecencia estuvo llena de solos con mucha clase de procedencia sureña, de temas que hacen tus pies bailar acompañando a la batería y estribillos pegadizos como el de “Can you Feel It?”, con el que Nichols jugó con el público. De su repertorio caben destacar “Crazy”, “Haywire” y “Playin' for Keeps”. También nos desveló (aunque un tanto evidentes) parte de sus influencias con dos versiones “Cat Scratch Fever” de Ted Nuggent y “Wishing Well” de Free.

Tras Jared, el escenario se llenó de árboles muertos y calaveras recordando la portada del álbum que Zakk Wylde venía a presentarnos: 'Book of Shadows II'. A pesar de que es la segunda parte de un gran álbum que se podría denominar sin animo de exactitud “de baladas” lanzado veinte años atrás, los asistentes no sabíamos exactamente que esperar de su setlist.

Como introducción, Zakk eligió una versión acústica e instrumental de “Stairway To Heaven”, tras la que apareció en el escenario junto a una formación entre la que se encontraba Dario Lorina o John DeServio, ambos de la Black Label Society. En cuanto al protagonista de la noche, este se presentó ataviado con un bombín (¿guiño al público británico o coincidencia?). Colgada sobre sus hombros llevaba uno de sus nuevos modelos de guitarra, y es que tendremos que sustituir en nuestras mentes la mítica imagen de Zakk y su Gibson Les Paul Bullseye, ya que ha lanzado su propia línea de guitarras y amplificadores... y evidentemente prefiere promocionar su marca.

Comenzó pues el concierto como comienza 'Book of shadows II', con “Autumn Changes”, “Tears of December” y “Lay Me Down”, tocadas de forma prácticamente consecutiva y sin necesidad del segundo guitarra. Zakk contaba con un podio a su lado al que subirse y ejecutar los solos, los cuales levantaban una marea de móviles que se apresuraban a por la deseada instantánea. Un sonido muy legible y limpio, que contradice muchos rumores y críticas infundadas sobre la “limpieza” en la ejecución de sus solos. Y es que el uso de distorsión no siempre es sinónimo de intento de enmascarar una técnica no muy depurada.

Tras los tres temas iniciales, era el turno de volver a temas del Book of Shadows original. Zakk se sentó al piano y comenzó a tocar “Road back home”, que fue el primer tema en despertar una notable reacción en el público, probablemente por la nostalgia de los reconocibles primeros acordes. A éste, le siguió otro temazo del mismo álbum, “Sold My Soul”.


Zakk Wylde presentará su 'Book Of Souls II' junto a Jared James Nichols el día 13 de junio en La Riviera (Madrid), el 14 de junio en Barts (Barcelona), y el 15 de junio en Santana 27 (Bilbao). Puedes hacerte con tus entradas haciendo clic aquí.


El concierto avanzaba con un Zakk Wylde lacónico, que no se dirigió al público en toda la velada. Quizás fuera por el hecho de que el concierto comenzó con retraso y la organización le obligó a acortar los espacios entre canciones, o bien porque decidió comunicarse con el público a través de solos extendidos sobre sus versiones originales que, a veces, se hacían demasiado largos.

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Zakk Wylde ejerció, una vez más, de guitar hero

Los temas de ambos discos se intercalaban y las pentatónicas atresilladas marca de la casa inundaban los oídos de los asistentes mientras el resto de músicos mantenían rítmicas repetitivas por varios minutos. Así escuchamos “Yesterday’s Tears”, “Between Heaven and Hell”, “Darkest Hour” y “Throwin’ it All Away”.

Entonces el escenario quedó vacío a excepción de una acústica unida a un soporte. Volvió a aparecer Zakk entre una ovación para tocar “Dead as Yesterday”, muy bien acogida por el público, que la cantó junto a él. Al tema acústico le siguió “Eyes of Burden” y “Way Beyond Empty” con un problema de cableado que ensuciaba el sonido y que no consiguieron solventar hasta el final de este segundo tema. “The King” con Wylde al piano, bajó el tempo del concierto.

Antes de entrar en la recta final del concierto Zakk tuvo un gran detalle que no muchos artistas suelen molestarse en conceder. Se colgó una guitarra inalámbrica y comenzó uno de sus largos solos y descendió del escenario acompañado por dos empleados de seguridad. El público enloqueció, y lo que parecía un gesto de exhibicionismo, se convirtió en un gesto muy amable por su parte, ya que su baño de masas se detuvo en la zona reservada para minusválidos. Los asistentes de esa zona tuvieron la suerte de ver muy de cerca y por varios minutos el talento en activo del señor Wylde.

Tras este gesto fue vitoreado y terminó ganarse el favor del respetable, que le acompañó durante los dos últimos temas “Last Prayer” y “Sleeping Dogs”. Tras despedirse rápidamente la banda cerró entre aplausos un gran concierto en el que se pudo echar de menos algún tema más del Book of Shadows original y especialmente el tema dedicado al fallecido Dimebag Darrell “In This River”.

Zakk, bien acompañado, ha conseguido crear un gran precedente para el resto de la gira europea con este concierto. Solamente esperemos no tener que esperar otros veinte años para leer un nuevo capítulo del libro de las sombras.

Texto: Miguel Ángel Galindo Abradelo
Fotos: Jesús Figueirido

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Esta entrada fue escrita por Redacción

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