Entrevista a Mustasch: "¡No quiero que mi mujer sea un hombre!"

8 enero, 2016 4:14 pm Publicado por  Deja tus comentarios

Proclamar la virilidad en un mundo políticamente correcto podría equivaler a una auténtica declaración de guerra. Lanzándose a la yugular de timoratos e impresionables, estos suecos han decidido titular su nuevo álbum simple y llanamente ‘Testosterone’, un término de innegable carga negativa hoy en día y que despeja dudas sobre sus intenciones. El guitarrista David Johannesson demuestra a Alfredo Villaescusa que los tiene bien puestos.

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No os habéis andado con chiquitas al elegir la palabra que identifica al disco…

“Lo teníamos claro incluso antes de componer la primera canción, nuestro manager nos animó a buscar un término que aludiera poderosamente a la masculinidad y no encontramos ninguno mejor que ‘Testosterone’…”.

¿No crees que pueda chirriar en algunas mentes?

“No, ¿por qué? (risas). No hay nada de lo que avergonzarse”.

Fuisteis hasta Tenerife para componer, ¿verdad?

“Sí, nuestro manager tiene un apartamento allí, empezamos a trabajar en Suecia, pero luego nos dimos cuenta de que debíamos ir a otro sitio para despejarnos y darle otro enfoque. Estuvimos en las Islas Canarias solo cuatro o cinco días, pero nos cundió bastante, puesto que componíamos casi un tema por jornada”.

Por primera vez Ralf ha dejado la guitarra para centrarse en su labor de cantante, ¿por qué?

“Bueno, básicamente yo compuse todas las canciones, así que sabía cómo debería sonar cada cosa, luego también nos influyó nuestro productor al asegurarnos que el resultado era mucho más rotundo si yo me concentraba solo en la guitarra y Ralf en la voz”.

"La verdad es que hombres y mujeres no pueden ser iguales, son diferentes; las niñas juegan con muñecas y los niños con cochecitos de juguete. ¿Cuál es el problema? Así son las cosas y no deberían cambiar".

¿Vais a mantener esta distribución de tareas también en el directo?

“No, ahí será diferente porque Ralf sí será necesario para llenar algunos huecos, de todas formas, todavía tenemos que ensayar y entonces ya barajaremos las diferentes posibilidades”.

Aprecio en “Yara’s Song” un matiz más melódico de lo normal, ¿cómo lo ves?

“Compuse ese tema hace cuatro años, pero lo había mantenido escondido porque no tenía el típico enfoque hard rockero o metalero, pero en cuanto los chicos lo escucharon, les gustó tanto que tuvimos que grabarlo. No me suelo preocupar demasiado por los géneros y demás, si una canción es buena, es buena y punto”.

Marcáis territorio con el single “Be A Man”, ¿qué significa ser un hombre hoy en día?

“En la actualidad es algo complicado, porque te dejan ser un hombre, pero tampoco demasiado, especialmente en Suecia, donde prima la igualdad sobre cualquier otra consideración. Pero la verdad es que hombres y mujeres no pueden ser iguales, son diferentes; las niñas juegan con muñecas y los niños con cochecitos de juguete, ¿cuál es el problema? Así son las cosas y no deberían cambiar. Creo que está bien que seamos distintos y que uno pueda decir en alto “Soy un hombre, ¿qué pasa?”. ¡Yo no quiero que mi mujer sea un hombre! (risas)”.

¿Os habéis preocupado en esta ocasión más por las letras?

“Yo suelo dar mayor importancia a la melodía, que es la base para todo, me fijo más en un concepto de forma general, por lo que no acostumbro a prestar exclusiva atención a un solo elemento”.

¿El sonido de este disco podría inaugurar una nueva etapa en Mustasch?

“Es una pregunta complicada porque siempre vamos a intentar hacer nuevas cosas y en esta ocasión el productor tuvo una importancia decisiva en el sonido final del disco. Por ejemplo, en lo que respecta a la guitarra, fuimos probando diferentes tonos en cada canción hasta encontrar el adecuado. No puedo contestar por lo tanto a esa pregunta, porque en el próximo álbum la situación podría ser completamente diferente, quién sabe…”.

"Siempre intentamos ofrecer un disco en el que no te canses al primer o segundo tema. Con AC/DC, por ejemplo, no existe ese problema, porque ya sabes lo que hay (risas)".

¿Abogarías por un trabajo duro y delicado al mismo tiempo?

“Claro, de hecho, es lo que suelo escuchar habitualmente, a veces me da por lo rudo… y otras por Dolly Parton (risas). Hoy en día la gente no se toma la música como lo hacían en los setenta, ochenta o noventa, sino que únicamente se fijan en una o dos canciones. Nosotros siempre intentamos ofrecer un disco en el que no te canses al primer o segundo tema, con AC/DC, por ejemplo, no existe ese problema, porque ya sabes lo que hay (más risas)”.

Con la portada tampoco os habéis comido demasiado la cabeza…

“Hablamos del tema, pero no lo teníamos nada claro, así que como todos en el grupo escuchamos música de los setenta, empezamos a mirar discos de esa época hasta que surgió la idea de una foto en directo con luces de fondo, como si fuéramos Motörhead o algo así. Es algo simple que dice “hey, aquí estamos y esto es lo que hacemos, si te gusta, genial, y si no, pues también””.

¿Cuándo volveréis a España?

“Estaremos hasta navidades por Escandinavia y luego todavía no tenemos claro qué haremos en primavera, así que podría ser una buena posibilidad girar por allí. Además, siempre salimos de fiesta en cada ciudad que vamos, incluso cuando tocamos en Suecia, nos encanta hablar con la gente y saber lo que piensan”.

¿Todavía mantenéis esa filosofía de hacer música sin compromiso?

“Sí, por supuesto, cuando te empiezas a comprometer con otra gente, es un gran problema…ya no haces lo que quieres. En esta ocasión, como he dicho, el productor tuvo mucho que decir, aunque en este caso fueron solo cosas positivas, a la hora de desarrollar tus propias ideas siempre es conveniente contar con alguien que pueda dar su punto de vista desde fuera”.

Habéis sacado hace poco vuestra propia marca de café, ¿es también para hombres?

(Risas) “Es muy fuerte, la verdad, pero en Suecia estamos acostumbrados al café fuerte…pero deja muy buen sabor al final”.

Alfredo Villaescusa

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Esta entrada fue escrita por Redacción

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