GRANITO ROCK

Juan Destroyer

Una vez más, y ya van nueve!, pudimos ser partícipes de esta gran fiesta del rock que se concentra en la sierra madrileña.
Es increíble la acogida que los villalbinos dan no sólo a la gestión del festival sino a la marea negra de melenudos que asolan durante un fin de semana su pueblo.De nuevo un éxito rotundo tanto por parte de la organización como por parte de los grupos ganadores del Concurso de Música Joven. Impecable sonido, puntualidad británica, precios populares y mucho buen rollo.

Mister Machín

El festival, al igual que años anteriores, se cerró sin un solo incidente, de hecho los encargados de la seguridad se ‘pegan' por que les asignen el cuidado de este festi, y no el de la Plaza de los Belgas donde el pop y la música hortera parece que alteran más a la fieras. Y es que ya lo decía Bruque "el heavy no es violencia".
De los seis afortunados grupos ganadores del reñido concurso de maquetas, abrieron fuego los entregados Mister Machín.

Venidos directamente de Burgos supieron llegar a la concurrida plaza comenzando su show con el "Ace of Spades" de Motorhead, con eso ya se metieron del tirón a la gente en el bolsillo que acogieron gratamente todas y cada una de las versiones (rindieron tributo en más de una ocasión a Led Zeppelin y Black Sabbath), además de los cortes propios de su reciente álbum "Change". Desde luego fueron los que mejor exprimieron el festival y si no hubiera sido por el bolo que tenían al día siguiente en Soria, estoy más que segura que se hubieran quedado también el sábado.

Opera Magna

Mucha expectación concentraba Opera Magna, los foros auguraban un gran concierto de los valencianos y no defraudaron.

Fantástica la voz de José y muy preciosistas los arreglos de teclado de Rubén. Se centraron en su disco más fresco, "Un sueño es un sueño" power metal sin concesiones, con aroma a la vieja escuela, pero sin dejar de lado anteriores trabajos. Sin duda la que más me gustó "El fuego de mi venganza" con unos riffs y un doble bombo que dejó a más de uno exhausto. Les seguiremos la pista.

Vita Imana

El espacio de nuevas tendencias lo llenaron los madrileños Vita Imana. Si te gusta Sepultura y su legado, Soulfly, no puedes dejar pasar esta banda con un directo avasallador.

Con Miriam al cargo de la percusión, y Dani tras el bombo, conforman una increíble base rítmica capaz de mover al más insulso.
"Gondwana" y "Cuando despierta" hicieron bailar hasta a los niños que se agolpaban en los columpios aledaños, mientras que sus padres daban buena cuenta de sus minis. Aquí hay calidad señores.

Alioth

Llegaba la hora de los cabezas del cartel, por derecho propio y con una ilusión tremenda calentaban motores Alioth.

Desgranaron uno a uno los temas de su último trabajo "30º Grados Norte" un compendio de poderosos guitarras, líneas de bajo cuidadas y una potente voz plasmados en cortes como "Océanos de arena" ó "RDBB".

Los fans llegados desde todos los rincones de la península agradecieron "Los perros de Pavlov" y "Alerta" himnos convertidos ya en imprescindibles.

Sintiéndose cada vez más arropados, encararon sin dilación "30º Grados Norte. La latitud de los caballos" obra maestra de los madrileños, con unos coros magníficos (bien configurados por los hermanos Marsellá) y una pegada brutal de Arnaldo.

Rage

La fastuosa guitarra de Juanjo, a la que arranca inconmesurables riffs, arpegios, tappings y demás florituras dignas de un guitar hero, le jugó esta vez una mala pasada, al perder por el camino una cuerda justo en el momento álgido de la noche. Las tablas y el buen hacer del guitarrista suplieron ese pequeño contratiempo, haciéndole volver rápidamente al escenario para encarar la divertida "Antisocial" coreada hasta por el apuntador.

Rápido, muy rápido se me pasó el recital, y para cuando me doy cuenta nos encontramos todos cantando el "Resistiré" de los Barones y con una sensación de que lo bueno dura poco.

Una vez pasado el bautizo de fuego ante una audiencia de más de cinco mil personas espero que Alioth puedan seguir disfrutando de las mieles del éxito, con el apoyo ya no solo de los entusiastas fans sino depromotores y discográficas que apoyen grandes bandas como esta.

Tras recuperar fuerzas, bocata en mano me pilla la intro de "Carved in Stone", y es que el trío Rage ya está en escena dispuestos a darnos cera.

Parece mentira que en ese pedazo escenario y a pesar de ser sólo tres, llenen de manera tan grandiosa las tablas, y no sólo me refiero al gran tamaño de  Peavy sino al valor incalculable de los alemanes en escena.

"Lord of the files" y "From the cradle to the grave" me hacen echar muy poco de menos al rompeparches Mike Terrana y eso que el novato André comienza un poco cohibido guarecido tras los platos.

Mención especial merece Víctor Smoslki que desgarra sin piedad su mástil en trallazos como "Set this World on Fire" o "All I want". Muchos son los olvidados dentro del mundo del rock y él es uno de ellos, poco reconocimiento hay dentro de la escena para músicos de su talla que muchas veces se ven relegados a un segundo plano en pos de otros más afamados y quizás menos virtuosos.

Caras de satisfacción e incredulidad a partes iguales, veo a mi alrededor cuando suenan las míticas "Don't fear the winter" y "Down" , que si chavales que estáis viendo por la patilla a los históricos Rage!.

Hard-Wires

Los oes, oes se suceden y Peavy, que nos rebautiza como ‘granitos' nos agradece nuestra abnegación. Tras dos horas de bolo nos abandonan con  "Great Old Ones" y ""War of Worlds". Un concierto sin duda para recordar.

Casi sin tiempo para recuperarnos, encaramos la jornada del sábado de la mano de los hardrockeros Hard-Wires.

Claramente influenciados por bandas como Guns'n'Roses o Poison (de los que harán una versión) supieron arrancar los primeros aplausos de la tarde con  "Hidden Secret" y "Boys night Song".Mucha pose y mucho glamour en forma de rock, no apto para aguerridos metaleros.

El error tipográfico en las camisetas del festival (que por tercer año consecutivo se agotaron) hicieron creer que los madrileños Thiside descargarían un potente heavy metal por los altavoces, pero nada que ver, para eso habría que esperar a Zenobia.

Zenobia

Amaya, la cantante, más cercana a registros como el de Sandra Nasic de GuanoApes o a Skin de Skunk Anansie, supo llevar en volandas al resto de componentes de Thiside, con una puesta en escena sobria pero enérgica, que hizo que nuestros compañeros fotógrafos se las vieran y se las desearan para sacar un retrato de la voceras.

Más que destacables "Kisstealers" y "Burning the swing".

Como ya pasara el día anterior con Opera Magna, los riojanos Zenobia venían acompañados de una legión de fans dispuestos a dejarse lo que hiciera falta para apoyar a su grupo. Tarareadas sin aliento "La historia terminó" o "Enterrado en vida" lograron llevarse para casa algún que otro puñado más de admiradores. Sin palabras me deja la voz de Jorge que nada tiene que envidiar a solistas ya consagrados tanto de la escena patria como extranjera.

Atlas

El tiempo de las grandes glorias había llegado y Atlas por fin recogía los frutos de largo tiempo de trabajo.

Formado por grandes músicos que antaño militaban en bandas como Niágara, Sobredosis, Ñu o Barón Rojo, la apuesta por una música de calidad era más que segura.

"Unidos" y "Una Nueva Oportunidad" consagran a los hermanos Arias como un dueto compacto y complementado, secundado por la imponente voz de Ignacio Prieto que se come las tablas y el público por las patas.

"Nosotros somos la revolución" demuestra las ganas y la potencia de José Martos que totalmente entregado nos complace con un delirante solo con lanzamiento de baquetas incluido.

Con "2040" y "Adicto a la carretera" aún en la retina, deseo que la trayectoria de esta banda siga en proceso ascendente y lleguen a las cotas de popularidad y reconocimiento de otras épocas.

Tan absorta estaba en el buen hacer de Atlas, que para cuando me doy cuenta el recinto del Parque de las Bombas estaba literalmente abarrotado.

Medina Azahara

Un amplio abanico de generaciones se agolpaban en las primeras filas deseosos de ver en escena a los grandes Medina Azahara.

Son incontables las veces que les he visto en directo, pero he de decir que jamás me han defraudado.

"Favorita de un sultán" enloquece a las masas y pronto confirmo la buena forma tanto física como vocal de Manuel Martínez, llegando a todos los agudos como antaño, "Córdoba" da buena fe de ello.

Thiside

Como homenaje a Triana nos descargan de sopetón "Abre la puerta", "El Lago" y "Noche de amor desesperada" con un Paco Ventura sobrado con las cuerdas.

Insustituibles temas tan inolvidables como "Palabras de libertad", "Todo tiene su fin" (esta vez sin niños), "A toda esa gente" o "Necesito respirar" en la que Manuel no tuvo más remedio que dejar de cantar para escuchar asombrado a la multitud enfervorizada.

La canción que más ilusión me hizo escuchar fue "Paseando por la Mezquita" corte que les llevaría a la fama allá por los años 80.

Eché de menos algún que otro tema como "La tierra perdida" o "Tu mirada" pero teniendo en cuenta la ingente cantidad de discos en su haber, es imposible que toquen todas y satisfagan a tantos. Sea como fuere después de 30 años en las carreteras me alegra comprobar que tenemos Medina para rato y que es posible ver juntos y disfrutando de la misma música a padres e hijos.

TEXTO: MartametallicA

FOTOS:Antonio Martín, Antonio Vázquez